sábado, 28 de noviembre de 2009

Causa. Causar. Causante. Causado.

Me he encontrado con un problema (¿existencial?), ¡no! nada grave, mi primer discurso, bueno, primero primerísimo no, ya hace unos meses tuve que hacer frente en la graduación a cientos de personas con miradas espectantes esperando que me emocionase y que les hiciera emocionar mientras me grababan con numerosas cámaras esperando enseñar el video generación tras generación en plan americano a sus nietos bisnietos y etc diciendo:¡mira querido, la graduación de tu padre/abuelo/bisabuelo!, pero mi don no es el de los llantos, ni la gracia, quizá sea el de la palabra, breve y concisa. En este caso, mi querido profesor Almela, cogió su diccionario (seguramente cualquier otro menos el de la RAE, conociéndolo... para poneros en situación: cincuentón rapado con camisas faroleras, mi madre siempre me dijo que los genios como es él cojean de algún ala, pues en su caso está claro que es en el gusto) y por tal página que abrió tales palabras nos tocó a las veinte personas centrar nuestro dichoso discursito. El mío, la causa (los temas iban desde las cortinas hasta los calendarios). Me quejo por vicio, pues me encanta mi tema...


¿Qué existe en el mundo que no tenga una causa? Todo tiene un origen. Piensa en el sustantivo/verbo/adjetivo/pronombre/loqueustedquiera, todos tienen ese 'por qué', más o menos escondido pero lo tienen.

Español normativo I.

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